Son muchas las cifras facilitadas por el Global Electric Vehicle Outlook 2022, el último estudio de la Agencia Internacional de la energía (AIE) sobre los coches eléctricos e híbridos enchufables en el mundo, y casi todos los números indican que los coches de batería están yendo muy bien.
En concreto, las matriculaciones de vehículos enchufables en 2021 incluso se duplicaron, alcanzando un récord de 6,6 millones. Una tendencia que también se mantiene en 2022, a pesar de los problemas con las cadenas de suministro: de hecho, se realizaron 2 millones de ventas en el primer trimestre, unas tres cuartas partes más que en el mismo período del año pasado.
Las cajas de las baterías para vehículos eléctricos (battery cases, también llamados bastidores, carcasas o paquetes de baterías) tienen un propósito bastante simple: sostener y proteger los módulos de la batería. Están disponibles en varias formas y tamaños y se pueden adaptar fácilmente a las diferentes características de los módulos de la batería.
Si bien actualmente muchas de las cajas están hechas de acero (o una combinación de aluminio y acero), el aluminio parece tener ventaja a largo plazo, sobre todo gracias a su ligereza y características técnicas favorables.
Por lo tanto, es fácil entender por qué se ha prestado tanta atención al mercado de las cajas de baterías, cada vez más avanzado tecnológicamente tanto en términos de materiales como de procesos.
Dentro de los procesos necesarios, los centros de trabajo CMS representan una referencia importante capaz de llevar a cabo los siguientes trabajos:
Los coches eléctricos están destinados a jugar un papel decisivo y ya han comenzado su ascenso. ¡Nosotros también queremos ser protagonistas de un futuro cada vez más sostenible!